Vista panorámica de la localización “Blood Rocks”
Uno tras otro, los asentamientos remotos que se encuentran en Blood Rocks han comenzado a quedarse en silencio. Pero, ¿a quién le importa las tierras salvajes lejos de la vida real, de los recursos, de los centros de poder y autoridad? Pero si cada mes sigue creciendo el número de asentamientos desaparecidos, incluso el asaltante más estúpido puede empezar a desconfiar.
Desde hace mucho tiempo son conocidas en Wasteland las ruinas de un complejo industrial que rodean Blood Rocks. Decenas de edificios, montañas de hierro oxidado y retorcido, esqueletos de mecanismos congelados de forma permanente — todo esto inicialmente atrajo la atención de aquellos supervivientes que esperaban encontrar algo útil — pero casi todos los que allí fueron desaparecieron sin dejar rastro.
El terreno ha sufrido una seria transformación, y ahora los asaltantes de varias facciones están intentando instalarse en la zona, protegiendo sus campamentos y territorios de aquellos forasteros que no han sido invitados.
La mayor parte del territorio está controlado por una banda de Lunáticos — los Bladespines. Eligieron las viejas minas como cuartel general, las reconstruyeron para ser habitables y cavaron más pasajes en el interior de las rocas. Llaman a su hogar la Guarida. Su jefe es el asaltante conocido en Wasteland como Fiercehog.
Además de a los Bladespines, en Blood Rocks uno puede encontrarse fácilmente con bandas más pequeñas de Lunáticos completamente salvajes. Escapar de ellos con tus entrañas intactas es un gran éxito.
Los Carroñeros todavía conservan un pequeño puesto de avanzada al Este. Excavan de forma activa en busca de petróleo y se pelean con los Lunáticos. Pero prefieren los golpes sigilosos e inesperados.
En la parte central de Blood Rocks hay un pequeño asentamiento de Ingenieros. Aquellos que son perseguidos por todos, sobreviven aquí como pueden. Su principal elemento de valor es el agua. Los Ingenieros están intentando hacer crecer algo y para esto han construído una gran torre de agua. Pero los asaltantes salvajes de la zona no cesan sus intentos de destruirlo.
No hace mucho apareció al noreste una ciudad Nómada errante. Uno de los destacamentos vino a Blood Rocks para alguno de sus asuntos secretos. Se rumorea que alguien atacó a los Nómadas. Hubo una batalla acalorada, y la famosa ciudad errante fue destruida parcialmente. Muchos Nómadas murieron, y su comandante desapareció.
Los Adoradores del Fuego se han establecido al suroeste. En una vieja cantera, organizaron un Coliseo de verdad, donde los asaltantes luchan hasta la muerte.
Al Oeste se encuentra el peor lugar de Wasteland. Todos los que han ido hasta ese lugar, o nunca regresaron, o perdieron la memoria.