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Crossout es un juego de acción MMO post-apocalíptico en el que puedes ensamblar tus propios vehículos de combate únicos a partir de una gran variedad de piezas intercambiables y luego subirte a ellos para participar en explosivas batallas multijugador tanto por aire como por tierra.

Estrella guía: Invisible no siempre significa “imaginario” (Segunda parte)

Puedes encontrar la parte anterior de la historia aquí.

— Entonces, ¿solo los muertos aún no saben de su llegada? — preguntó Ivy XO, sin levantar la cabeza de debajo del capó del vehículo blindado. — Hacer tanto ruido no era la mejor opción para ellos, teniendo en cuenta lo que están buscando. ¿Verdad, Foxy?

No fue hasta el final de la frase que Ivy finalmente dejó de hurgar en las piezas, y, tras limpiarse las manos cuidadosamente con un trapo manchado de grasa, miró amablemente a Foxy. En esos momentos, ella estaba parada cerca de la mesa con herramientas, preparando las piezas que tenía en sus manos.

— Quizás querían hacer todo el trabajo rápidamente, pillando al Valle por sorpresa… — sugirió Foxy, al sentir los ojos de alguien más sobre ella.

— Siempre justificas a todo el mundo. Por otro lado, es bueno que mantengas la situación bajo control. Estos no son los mejores tiempos.

Ivy cerró de golpe el capó y saltó hábilmente al interior de la cabina. El vehículo blindado empezó a toser, aparentemente en un intento de arrancar. Foxy puso las piezas sobre la mesa y se acercó a la cabina para que Ivy pudiera oírla. Uno de los engranajes rodó repentinamente por el banco de trabajo y se detuvo inesperadamente en el mismo borde.

— ¡No es una excusa, sino un cálculo táctico! El Sindicato se fortalece cada día. Su tecnología es comparable a la de los Hijos del Amanecer, o incluso puede superarla en algunos aspectos. Y Lloyd parece tener algo con lo que poder oponerse al Sindicato. Recientemente, los Dragones empezaron a reclutar supervivientes en preparación para la guerra contra él. Hablan de ello incluso en el “Ojo de la cerradura”. Desafortunadamente, no todo el mundo entiende que es mejor no hacer negocios con extraños, especialmente si ni siquiera explican lo que hay que hacer.

El vehículo no dejaba de “toser”. Ivy salió de la cabina y se acercó al capó, maldiciendo.

— Parece que todo esto es realmente muy serio, — dijo la líder de los Ingenieros, mientras volvía a examinar el interior del vehículo blindado a la vez que sacaba el walkie-talkie de su bolsillo. — Necesito a un hombre para arreglar el motor del “Arrow”. ¿Sigue todo tranquilo en los puestos de control? Es bueno saberlo. Cambio y corto.

— Esto es realmente serio, Ivy. Los Dragones ya han establecido un puesto de avanzada en el Distrito Este, — Foxy se acercó a su vieja amiga y la miró a los ojos. Una vez juré encontrar a Lloyd, y creo que ha llegado el momento. Rastrearlo siempre ha sido casi imposible. Pero dado que el Sindicato también lo está buscando y lo están haciendo mejor, debemos observar su progreso.

La líder de facción se alejó de su subordinada y se sentó en su escritorio, poniendo sus pies sobre él.

— Así que por eso es por lo que les diste pistas sobre Lloyd cuando los Dragones vinieron a nosotros por primera vez. ¿Y si logran encontrarlo primero?

Ivy le señaló a la chica de ojos azules una silla frente a ella. Y, mientras esperaba a que se sentara, sonriendo con sarcasmo, dijo:

— Estos tipos con chistosas ruedas no resultaron ser tan divertidos, ¿verdad?

— ¡De eso estoy hablando! Durante esa reunión que tuvimos con ellos, Blade dijo que los Ravagers seguían siendo una amenaza, especialmente su tecnología en manos de Lloyd.

De repente, Foxy volvió a mirar hacia la mesa, donde había dejado los engranajes y trazó con la vista una línea hasta sus pies. Luego se inclinó hacia el suelo y acarició el aire, varias veces, cerca de la silla donde estaba sentada.

— Así que tu mascota todavía está contigo… Pero aún así, ¿por qué no nos enteramos de este peligro antes? — Ivy levantó las manos.

— Quizás los estaba probando, — Foxy se quedó pensando durante unos segundos y cerró los ojos. — ¡Ese momento! Cuando intentamos restaurar los recuerdos de las víctimas de los Ravagers con este loco, también se estuvo preparando durante mucho tiempo y solo puedo poner en marcha la máquina con la ayuda del Shaman. Ya no cuenta con un aliado así.

La radio en el bolsillo de Ivy XO siseó, pero, tras escuchar durante unos segundos, interrumpió al que le estaba hablando y le ordenó que regresara más tarde.

— Tus palabras tienen mucho sentido. Sé que lo entiendes, pero déjame recordártelo una vez más: el Sindicato no son nuestros amigos, ni siquiera aliados. Es posible que su objetivo no sea destruir a Lloyd ni la tecnología de los Ravagers, sino capturarlos y luego usarlos no en nuestro favor. Averiguarás cuáles son sus intenciones y encontrarás a este psicópata. Pero por favor, Foxy, ten cuidado.

Ivy se acercó a su compañera y la miró a los ojos, y luego la abrazó con fuerza, tomando a la joven por sorpresa.

— Exijo informes periódicos a medida que avances en tu investigación. Espero que podamos usar la tecnología para nuestro provecho, pero si ese no es el caso, tendremos que destruirla. 

De repente se oyó como alguien llamaba a la puerta del hangar y se escuchó el chirrido de bisagras mal engrasadas. Inmediatamente, Ivy se sentó en su asiento y volvió a poner sus pies sobre la mesa, cogiendo el primer plano que encontró.

— ¡Te dije que vinieras más tarde!

— Deberíamos irnos, — dijo Foxy mientras se ponía en pie. Finalmente, miró hacia el suelo junto a la silla, donde previamente había acariciado el aire. — Bunny, vámonos.


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19 mayo 2021
Historias